Hymz (Insects), de Jan Švankmajer, Republica Checa, 2018. 94′ Dirección y guión de Jan Švankmajer (Novela: Karel Capek. Obra: Karel Capek, Josef Capek). Fotografía de Animation, Adam Olha, Jan Ruzicka. Reparto de Animation, Jirí Lábus, Jan Budar, Jaromír Dulava, Norbert Lichý, Kamila Magálová,Ivana Uhlírová.Productora: Athanor / Ceská Televize / PubRes

El gran autor surrealista se presenta ante la cámara desnudo de artificio para compartir ideas, obsesiones y oficio en un rodaje dentro de un rodaje del que surge una película que es a su vez un documental, una ficción y una obra de teatro. En Insect, película que combina imagen real con algo de animación, Švankmajer recupera un proyecto acariciado largo tiempo, la obra de teatro misantrópica de los hermanos Čapek De la vida de los insectos, y lo lleva a escena con una compañía de teatro amateur. Ya en el prólogo anuncia, como si de un juego surrealista se tratase, su proceso creativo.

“No es mi última película porque yo lo quiera, simplemente soy realista”, afirma con total tranquilidad y humor el octogenario artista, consciente de que al menos necesita cinco años para levantar un presupuesto y realizar un filme. Sin embargo su actividad no cesa. Con Hmyz cerrando el circuito de festivales, acaba de inaugurar “The Alchemical Wedding” una exposición individual que puede verse en el Eye Museum de Amsterdam hasta el 3 de marzo. Su actividad artística en la creación plástica es prolífica y tras haber publicado un ensayo, trabaja ahora en un nuevo libro de ficción.

Porque, en Insect, el artista hace realidad un proyecto muy antiguo: recuperar la pieza teatral de los hermanos Karel y Joseph Čapek De la vida de los insectos y filmarlo mientras lo pone en escena una compañía de teatro amateur. Las imágenes, una vez filmadas, son sometidas a un proceso de manipulación durante el cual se le añaden las animaciones que tanto gustan a Švankmajer. Pensad que el artista es una de las principales referencias actuales del cine de animación en stop-motion.

Subversivo, radical, resistente… Este film, que es a la vez un documental, una ficción y una obra de teatro, tiene un guion escrito de manera automática, en la mejor tradición surrealista, sin censura ni autocontrol de ningún tipo.