Giacinto Scelsi. The First Motion of the Immovable, de Sebastiano d’Ayala Valva

By septiembre 23, 2019Sin categoría

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Los valientes duermen solos nº 1004
Giacinto Scelsi. The First Motion of the Immovable (2018), de Sebastiano d’Ayala Valva

«Giacinto Scelsi se había acercado a la composición de manera relativamente convencional, hasta los años cincuenta, cuando adquirió su primera grabadora de cinta Revox y el instrumento electrónico Ondiola, una versión italiana del clavioline. El clavioline es el instrumento de teclado con el que está tocada la melodía principal de «Telstar» de The Tornadoes. Un dial rotatorio agregado al Ondiole le permitía producir micro tonos, que podían combinarse con otros ajustes y controles para lograr la mayor expresión.» Los valientes duermen solos. Lunes 23 de septiembre de 2019.

Giacinto Scelsi. The First Motion of the Immovable (2018), de Vincent Buranelli. 81′. Francia e Italia.

Inmersión en el misterioso mundo del poeta y compositor contemporáneo Giacinto Scelsi, precursor de la música drone, y sus ideas sobre la reencarnación y el poder del sonido para conectar con otros planos de la existencia. Un retrato sin rostro. En esta coproducción italofrancesa, en la que escuchamos la voz y percibimos en todo momento la presencia de su protagonista sin llegar a verlo, el director (pariente lejano de Giacinto Scelsi), elude la biografía convencional y opta por zambullirse en su heterodoxa y mística concepción del sonido y de la música. Tras un relativo éxito en los años 50, Scelsi vivió (voluntaria e involuntariamente) recluido la mayor parte de su vida, no autorizó que nadie le fotografiara e, ignorado incluso en los círculos de la música contemporánea, dio forma a un lenguaje musical propio: una única nota modulada hasta el infinito o bien racimos de notas sostenidas.

Partituras imbuidas de magia, sensualidad y espiritualidad oriental que aseguraba “recibir” de divinidades hindúes. En 1973 grabó sus memorias en un magnetófono durante cuatro noches y exigió que las cintas no se hicieran públicas hasta 15 años después de su muerte. De la mano de las principales intérpretes de Scelsi –la soprano Michiko Hirayama, la contrabajista Joelle Léandre, la pianista Marianne Schroeder y la clarinetista Carol Robinson– el narrador explora el trasfondo de aquella inquietante música ultraterrenal que descubrió siendo niño en un hipnótico filme atravesado de principio a fin por un tema de fondo: la muerte y cómo enfrentarse a ella.